Saludos a todos/as!
Ya estoy de vuelta en casa.
2 días en Cusco, 2 en Aguas Calientes, pueblito antesala del Machupicchu, y otro día de viajes y demás. Todos increíbles.
Cusco tiene un centro histórico lleno de historia (nunca mejor dicho), de callecitas estrechas llenas de encanto, bares y casas de ensueño y rincones mágicos. El resto de Cusco, como casi todas las ciudades importantes de Perú, son chavolas, barrios pobres, casas sin terminar, construcciones inimaginables en pampas o en las laderas de las montañas, etc. Pero sin duda merece la pena pasear por sus calles, visitar su Plaza de Armas, sus iglesias, comer en los carritos de anticuchos de sus calles, etc.
Aguas Calientes por desgracia es un pueblito perdido en plenos Andes centrales, que está totalmente orientado al turismo. Hoteles y hostales por todos lados y bares y restaurantes trilingües. Muy bonito su paisaje rodeado verde, sólo se puede llegar en tren por unos desfiladeros y unas montañas selváticas preciosas, pero llegar y ver el pueblo tan... "poco pueblo" de verdad, te hace sentir un poco cómplice y culpable de haber "destrozado" ese lindo lugar.
Machupicchu es maravilloso. La gente puede pensar que viendo las fotos se puede hacer una idea de la magnificencia y grandiosidad del lugar, pero si no vas, si no paseos por las ruinas y si no tienes una persona (guía) que te cuente la historia y el porqué de cada cosa, no te puedes ni acercar a lo que significa Machupicchu. Todo se une para dar sentido a una de las 7 maravillas del mundo, el sol, los montes de alrededor, las piedras estratégicamente colocadas, los patios y terrazas construidas siguiendo las ondulaciones de la tierra para evitar desprendimientos, los santuarios para observar las estrellas, etc.
Todo ello vivido con Fransi y un grupo fantástico de 11 voluntarios de Comillas que han hecho que el viaje haya sido maravilloso y lleno de conversaciones, ratos y momentos inolvidables.
Secuelas: un resfriao del copón, los oídos afectados, una media de sueño de 4 horas diarias, no dormir en tu cama y una pechá de horas de viaje en bus, hacen que tenga muy poquitas ganas de ponerme a trabajar mañana.
Y en un intento por acortar un poco los artículos voy a dejar aquí este.
Pronto estarán subidas tanto las fotos que hemos hecho Fransi y yo como las que han hecho el resto de voluntarios de Comillas. Paciencia y os prometo que las disfrutareis.
P.D: TQ
Ya estoy de vuelta en casa.
2 días en Cusco, 2 en Aguas Calientes, pueblito antesala del Machupicchu, y otro día de viajes y demás. Todos increíbles.
Cusco tiene un centro histórico lleno de historia (nunca mejor dicho), de callecitas estrechas llenas de encanto, bares y casas de ensueño y rincones mágicos. El resto de Cusco, como casi todas las ciudades importantes de Perú, son chavolas, barrios pobres, casas sin terminar, construcciones inimaginables en pampas o en las laderas de las montañas, etc. Pero sin duda merece la pena pasear por sus calles, visitar su Plaza de Armas, sus iglesias, comer en los carritos de anticuchos de sus calles, etc.
Aguas Calientes por desgracia es un pueblito perdido en plenos Andes centrales, que está totalmente orientado al turismo. Hoteles y hostales por todos lados y bares y restaurantes trilingües. Muy bonito su paisaje rodeado verde, sólo se puede llegar en tren por unos desfiladeros y unas montañas selváticas preciosas, pero llegar y ver el pueblo tan... "poco pueblo" de verdad, te hace sentir un poco cómplice y culpable de haber "destrozado" ese lindo lugar.
Machupicchu es maravilloso. La gente puede pensar que viendo las fotos se puede hacer una idea de la magnificencia y grandiosidad del lugar, pero si no vas, si no paseos por las ruinas y si no tienes una persona (guía) que te cuente la historia y el porqué de cada cosa, no te puedes ni acercar a lo que significa Machupicchu. Todo se une para dar sentido a una de las 7 maravillas del mundo, el sol, los montes de alrededor, las piedras estratégicamente colocadas, los patios y terrazas construidas siguiendo las ondulaciones de la tierra para evitar desprendimientos, los santuarios para observar las estrellas, etc.
Todo ello vivido con Fransi y un grupo fantástico de 11 voluntarios de Comillas que han hecho que el viaje haya sido maravilloso y lleno de conversaciones, ratos y momentos inolvidables.
Secuelas: un resfriao del copón, los oídos afectados, una media de sueño de 4 horas diarias, no dormir en tu cama y una pechá de horas de viaje en bus, hacen que tenga muy poquitas ganas de ponerme a trabajar mañana.
Y en un intento por acortar un poco los artículos voy a dejar aquí este.
Pronto estarán subidas tanto las fotos que hemos hecho Fransi y yo como las que han hecho el resto de voluntarios de Comillas. Paciencia y os prometo que las disfrutareis.
P.D: TQ
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